Ambientes de Aprendizaje. Elementos que lo componen

 

Los ambientes de aprendizaje se encuentran conformados por actores académicos, sociales y psicológicos. Los elementos que constituyen los ambientes de aprendizaje, asimismo, contienen características derivadas de ellos. Es necesario tener en cuenta el espacio y entorno físico, tales como su mobiliario y dimensiones, entre los más inmediatos, dado que éstos influyen en el proceso de aprendizaje de los estudiantes y hasta en su forma de interactuar dentro del salón de clases. Así pues, tanto el espacio físico – el diseño arquitectónico y sus dimensiones- como el espacio psicológico – el cual regula lo sensorial y emocional – son fundamentales para el aprovechamiento y aprendizaje escolar en los alumnos.

Con relación a lo anterior, en Duarte (2003) se exponen tres componentes centrales de los ambientes de aprendizaje:

a)      Las condiciones físicas

b)      Las condiciones sociales y afectivas

c)      La enseñanza y el aprendizaje

Indica que, además de requerir de un espacio físico específico para llevar a cabo el proceso de aprendizaje, dicho espacio debe ser seguro, cómodo y propiciador de interacciones satisfactorias para los estudiantes, además de la incorporación de materiales necesarios para una buena organización de los alumnos, facilitando el trabajo colaborativo entre ellos.

Por su parte, J. Brophy (2000) sostiene que en los ambientes de aprendizaje, la práctica docente adquiere sentido cuando el estudiante aprende de forma efectiva los contenidos y para ello señala los siguientes elementos importantes:

a) Que el docente tenga profundo conocimiento de lo que enseña

b) Que proporcione retroalimentación, apoyo y considere los conocimientos previos del        estudiante

c) Que las interacciones entre docentes y alumnos sean cordiales

d) Que el docente de un uso adecuado al tiempo y a los materiales

e) Que diseñe secuencias didácticas pertinentes

f) Que sea reflexivo, se profesionalice, trabaje de forma colaborativa y mantenga comunicación asertiva con alumnos, colegas y padres de familia.

En relación a lo anterior, en Lanz (2003) se resalta la convivencia entre los actores académicos y como ello representa un espacio de acciones y emociones, de experiencias personales, que fomentan la reflexión en alumnos y docentes, de una forma colaborativa, con las transformaciones y reestructuraciones que llevan a nuevas posturas en el aprendizaje. Es decir, otro de los elementos de los ambientes de aprendizaje es la convivencia interactiva y las experiencias personales que llevan a la reflexión constructiva y a la transformación continua de los ambientes en el aula, proceso normal, que forma parte de la interacción humana.

Para Iglesias (2008) dependiendo del nivel cognitivo y el grado académico en que se encuentre el estudiante, los ambientes de aprendizaje se deben ajustar a sus condiciones para que realmente ocurra el aprendizaje. Esto es, las condiciones son parte de los elementos que conforman los ambientes de aprendizaje. Por lo tanto, dicho autor sugiere considerar los siguientes indicadores:

a)    Superar el espacio físico para considerarlo como un espacio de vida

b)  El ambiente que se genere en dicho espacio muestra los intereses, necesidades e interacciones comunicativas, de personas, de recursos y del exterior

c)     Definir las dimensiones física-funcional-temporal-relacional que se da en ese ambiente

d)     Lo esencial es que se conforma un ambiente de aprendizaje